Carla Gordillo R.
Dos tráiler volcados a la altura de la “Curva del Diablo” y un muerto, fue el saldo de la falta de precaución y el exceso de velocidad de los conductores de dos pesadas unidades en el tramo carretero Arriaga-Tapachula.
Alrededor de las 10:30 de la mañana, tráiler marca Kenworth de color rojo y caja color blanca, con placa de circulación del cabezal 05AP7 del transporte de carga y con número económico 545, conducido por el C. German Gernech Ortiz de 43 años, originario de la ciudad de Campeche, el cual salió de la ciudad de Campeche con destino a Tapachula, Chiapas y transportaba productos de abarrotes, circulaba en el tramo carretero Arriaga-Tapachula, al llegar a la altura de la Curva del Diablo, perdió el control de la pesada unidad, saliéndose de la cinta asfáltica y terminando volcado.
Del accidente el chofer de la unidad resulto con golpes contusos, por lo que fue atendido por los paramédicos de Protección Civil y trasladado al Hospital General de Huixtla para su valoración médica.
Así mismo, aproximadamente a la 01:20 de la tarde, cuando se encontraban realizando maniobras de levantamiento de la pesada unidad volcada anteriormente, otro tráiler marca Kenworth de color naranja con placa de circulación 706-FC-7 y de plataforma color gris con placas de circulación 928-WS-3 con número económico 662 que transportaba material de construcción, perdió el control de la unida, saliéndose de la cinta asfáltica y terminando volcado.
Desafortunadamente una persona que permanece en calidad de desconocida perdió la vida aplastada por el tráiler, ya que en esos momentos se encontraba levantando frituras de abarrotes del cargamento que traía el vehículo anterior, mientras que el chofer de la pesada unidad después de accidentarse se dio a la fuga con rumbo desconocido.
Al lugar del accidente tomaron conocimiento las diferentes corporaciones policías y personal de la Policía Federal, quienes ordenaron el levantamiento de las pesadas unidades al Corralón, mientras que el personal del Ministerio Público ordeno el traslado del Cadáver al SEMEFO para practicarle la necropsia de ley, en donde se espera que en las próximas horas los familiares del occiso lleguen a reconocerlo.