El pasado viernes alumnos de quinto grado de la Escuela primaria Belisario Domínguez, ubicada en Comitán, presuntamente encerraron en el baño de la escuela y le hicieron una cortada con una tijera en la lengua a un menor de tercer grado.
Ante esto, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) informó que a través de la Visitaduría General Especializada de Atención de Asuntos de la Mujer, a cargo de Jakelin Sauza Marín, radicó de oficio la queja por las probables violaciones a los derechos humanos de la niñez por el caso de este estudiante.
Aquí el comunicado de la CEDH:
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos, a través de la Visitaduría General Especializada de Atención de Asuntos de la Mujer, a cargo de Jakelin Sauza Marín, radicó de oficio la queja CEDH/0672/2016 por las probables violaciones a los derechos humanos de la niñez por el caso de un estudiante de la escuela Primaria “Dr. Belisario Domínguez” en Comitán de Domínguez, luego de que en los medios de comunicación impresa se difundiera la noticia de que un niño había sido agredido al interior de dicho plantel.
La situación fue atendida de manera inmediata por el Organismo Protector de los Derechos Humanos, y se emitió la medida precautoria CEDH/VACOM/MP/017/2016, con el objetivo de solicitar a la Secretaría de Educación del Estado que proteja la integridad física y psicológica del menor agraviado a fin de evitar hechos de difícil o imposible reparación.
Cabe agregar que, de acuerdo al Estudio Internacional sobre la Enseñanza y el Aprendizaje, realizado en 2013, por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, en México, siete de cada diez niñas, niños y adolescentes de primaria y secundaria han sufrido algún tipo de violencia escolar, con graves daños a su autoestima o salud psicoemocional, lo que se traduce en violación a los Derechos Humanos.
Al respecto, Sauza Marín señaló que atendiendo al interés superior de la niñez, las autoridades deben intervenir de manera oportuna y urgente frente a situaciones de violencia contra niños y niñas para salvaguardar su integridad física y emocional. Agregó que además se debe tener como eje rector una educación libre de violencia basada en el respeto a los derechos humanos, la no discriminación, la solidaridad y todos aquellos valores que permitirán un óptimo desarrollo en la vida de los mismos.
