Norma Patiño
(CODICS).- Max Correa Hernández, Secretario General de la Central Campesina Cardenista, advirtió que el recorte presupuestal recién anunciado por la Secretaria de Hacienda al Gasto Público, sí afectará programas sociales que aplica la Sagarpa y la Semarnat, situación que agudizará la crisis en el campo mexicano pues a ello se suma el desplome en el precio internacional de los granos básicos como el maíz y el trigo además de algunas oleaginosas.
Al participar en el Congreso de la Central Campesina Cardenista en Tlaxcala, con la presencia de 600 militantes de la organización provenientes de 19 municipios del estado, Correa Hernández, recordó que la caída en el precio del barril de petróleo obligó al Estado a hacer recortes en Ejercicio Fiscal 2016, los cuales “también le van a llegar a las dependencias y a los programas productivos de la Sagarpa, de la Semarnat y otras instituciones con las que las organizaciones campesinas trabajamos”.
En su discurso, insistió en que los precios de los granos mexicanos corren la misma suerte que los precios del petróleo ya que existe una caída en el precio internacional de los principales granos como en el caso del maíz, el trigo y otros; de ahí la urgencia de estar preparados pues esta tendencia se mantendrá cuando menos en los próximos cuatro o cinco años.
Lo anterior, aseguró, se complica a un más, dijo, si consideramos que en México es ilustrativo el minfundio en el caso del maíz, el cual es por mucho el cultivo agrícola más importante del país.
Este cultivo está en manos de aproximadamente 2 millones de productores de los cuales el 85% tienen parcelas o predios cuya extensión es menor o igual a 5 hectáreas, detalló.
Por otra parte se debe subrayar que en el futuro ya no tendremos crecimientos espectaculares de productividad en la zona de riego.
El otro extremo constituido por la economía campesina y producción de pequeña escala, ubicada principalmente en zonas de temporal existe un potencial agrícola no aprovechado debido a la insuficiencia de apoyos.
En este marco de difícil acceso a los recursos institucionales, se agregan las afectaciones y ocupaciones de tierras las cuales constituyen el patrimonio económico y social de las familias campesinas, sentenció.
Asimismo, Max Correa recordó que la expansión urbana, las obras de infraestructura y megaproyectos en general generan destrucción y depredación en las comunidades rurales.