En Niza, Francia, durante los festejos del 14 de julio, un camión arrolló a una multitud tras los fuegos artificiales en el concurrido Paseo de los Ingleses, el saldo de este hecho que fue calificado como un atentado, es de 84 muertos y 18 heridos de gravedad.
El autor de esta matanza, que fue abatido por la policía, fue identificado como Mohamed Lahouaiej Bouhlel, un conductor de envíos profesional de 31 años nacido en la localidad tunecina de M´Saken y que tenía permiso de residencia en Francia.
El sujeto tenía su apartamento en el sector norte de la ciudad, fue registrado por la policía. Durante las investigaciones se descubrió que es padre de un hijo de tres años, estaba fichado como delincuente común pero hasta ahora no se tenía constancia de que se hubiera radicalizado en una red terrorista.
Dentro del camión fue encontrado una tarjeta de crédito y un móvil, el vehículo fue alquilado por él con documentación válida. Los vecinos de su barrio señalaron que el hombre se hallaba en trámites de divorcio y tenía problemas con su familia en Túnez.
Mohamed Lahouaiej Bouhle fue abatido por la policía mientras arrollaba a la multitud que se encontraba en el paseo de los Ingleses, tenía en su poder un arma corta de calibre 7.65, que utilizó antes de ser abatido, pero también otras armas largas y una granada de mano, en ambos casos ficticias.
Los investigadores tratan de averiguar si tuvo cómplices. Hasta el momento ningún grupo terrorista ha revindicado el ataque, aunque todo señalaba a Daesh, sin embargo, el grupo ya anunció que aunque se “alegra” de lo sucedido, no ordenó dicho atentado.