La periodista Anabel Flores Salazar, quien fue secuestrada por un comando armado en su casa el pasado lunes en la madrugada, fue encontrada sin vida al borde de una carretera del Estado de Puebla.
La periodista quien se especializaba en información sobre crímenes trabajaba para El Sol de Orizaba, fue encontrada muerta en un paraje del municipio de Tehuacán, Puebla, a 15 kilómetros de Veracruz, por el momento no hay detalles sobre el motivo y autoría de su asesinato, fuentes extraoficiales en Puebla revelaron que la víctima tenía la cabeza cubierta con una bolsa de plástico, esposas en las muñecas y los pies atados.
La periodista tenía 32 años de edad, era madre de un bebé recién nacido y de otro niño de aproximadamente cuatro años, con este caso suman 17 periodistas asesinados de Veracruz en lo que va del actual sexenio del controvertido Javier Duarte, del Partido Revolucionario Institucional.
Con Anabel van tres asesinatos que no se dan dentro de la entidad a pesar de que su ejercicio periodístico lo desarrollaban ahí, Armando Saldaña de la Ke Buena, y Ruben Espinosa de Proceso fueron asesinados en estados distintos a Veracruz.
La dependencia veracruzana señaló en su flujo de información que la reportera mantenía vínculos con la delincuencia organizada, sobre todo con un presunto delincuente de nombre Víctor Osorio Santacruz, El Pantera.
El Ministerio Público Federal indicó que solicitó información a la Fiscalía General de Veracruz, al Ejército y a la Secretaría de Marina, ya que presuntamente un grupo de “hombres ataviados con uniformes tipo militar, chalecos antibalas y pasamontañas, irrumpió con violencia en el domicilio de la periodista” y la privaron de su libertad.
